Kathleen Hennings, una mujer británica que acaba de celebrar su cumpleaños número 105, ha revelado una sorprendente receta para vivir más de un siglo: la cerveza Guinness y, curiosamente, mantenerse soltera. En su cumpleaños, rodeada de amigos y familiares, la centenaria no solo festejó el hito de su vida, sino que también compartió la fórmula que, según ella, ha sido crucial para llegar a una edad tan avanzada.
Nacida en el distrito londinense de Brixton, Kathleen ha vivido una vida llena de momentos emocionantes. Su carrera como contadora la llevó a una existencia bastante activa, tanto laboral como socialmente. En sus recuerdos, destaca su pasión por el baile en Covent Garden y sus frecuentes visitas a la Royal Opera House, donde disfrutaba de las óperas y ballets. A lo largo de los años, su vida estuvo llena de aventuras, viajes y actividades que la mantenían siempre ocupada y animada. Sin embargo, a sus 105 años, asegura que su mayor secreto de longevidad ha sido mucho más sencillo de lo que cualquiera podría imaginar.
En sus declaraciones, Kathleen reveló que la clave para mantenerse en buena salud fue disfrutar de una cultura cervecera que comenzó desde su adolescencia. Fue a los 18 años cuando, gracias a la influencia de sus padres, probó por primera vez una Guinness, la famosa cerveza negra irlandesa que, según ella, ha sido su favorita durante toda su vida. “Todos en casa bebíamos Guinness, a mis padres les encantaba y, claro, yo me uní a ellos”, comentó Kathleen, asegurando que esta bebida se convirtió en parte esencial de su vida cotidiana.
El impacto de su amor por la Guinness fue tal que, incluso en su casa, era una tradición mantener una existencia cervecera constante. “Era algo que siempre formaba parte de las compras del supermercado. Guinness estaba presente en todos nuestros días», agregó, haciendo hincapié en cómo esta bebida se convirtió en un símbolo para ella y su familia.
Para conmemorar su 105º cumpleaños, la famosa marca de cerveza Guinness no quiso perder la oportunidad de hacerle un regalo especial. Le enviaron una canasta personalizada que incluía, entre otras cosas, vasos de cerveza, pantuflas y hasta chocolates. Además, el hogar de ancianos donde actualmente reside también se unió a la celebración con una fiesta dedicada a esta mujer longeva y activa.
La gerente del hogar donde Kathleen vive, Malaika Charles, compartió su entusiasmo por el evento: “Nos encanta celebrar momentos especiales aquí en Sandfields, y el cumpleaños de Kathleen fue, sin lugar a dudas, un motivo para organizar una gran fiesta. Queremos agradecer a todos los que se unieron para levantar una copa de Guinness en su honor», dijo, destacando lo especial que fue la celebración.
Aunque el amor por la cerveza es un tema recurrente en esta historia, no es lo único que ha ayudado a Kathleen a mantenerse sana durante tantos años. Además de su tradición cervecera, hay que reconocer que esta mujer sigue una dieta estricta y tiene hábitos diarios que contribuyen a su bienestar. Si bien la Guinness es su favorita, no hay duda de que sus otros hábitos también han jugado un papel importante en su longevidad.
Este tipo de historias no es aislado, ya que muchos estudios han demostrado que ciertos comportamientos pueden aumentar significativamente las posibilidades de vivir una vida larga y saludable. Un estudio de Johns Hopkins sobre más de 6.000 personas encontró que aquellos que adoptaron comportamientos saludables, como no fumar, mantener un peso saludable, practicar actividad física diaria y seguir una dieta balanceada, redujeron las probabilidades de morir por diversas causas en un asombroso 80%.
Si bien Kathleen no es un ejemplo exacto de este estudio, su longevidad parece ser una mezcla única de factores, entre ellos su afición por la cerveza y su enfoque relajado hacia el matrimonio. Aunque el mundo moderno tiende a promover dietas estrictas y rutinas extenuantes para alcanzar una vida más larga, historias como la de Kathleen nos recuerdan que la clave de la longevidad puede estar en disfrutar de la vida, mantenerse activo, y encontrar placer en lo que hacemos, incluso en las pequeñas cosas como una buena cerveza.
Lo que está claro es que, a los 105 años, Kathleen es un ejemplo viviente de que el amor por lo que hacemos, mantener buenos hábitos y rodearse de seres queridos puede contribuir a una vida larga y feliz. Quizás la Guinness no sea la receta para todos, pero sin duda, para ella ha sido un ingrediente fundamental en su vida.
0 Comments